En el último post, cité el artículo de Christopher Partridge en UFO Religions de la siguiente manera:

«Aunque existen algunas diferencias entre los maestros teosóficos / mahatmas de la sabiduría (que normalmente se creía que residían en el Tíbet) y los primeros relatos de extraterrestres, en realidad las similitudes entre ambos son sorprendentes y las diferencias bastante superficiales».*

En esta entrada me gustaría explicar un poco más lo que Partridge quiere decir con estas «sorprendentes similitudes». Partridge enumera (p. 12) las siguientes características compartidas por los maestros ascendidos de la teosofía y los primeros relatos de extraterrestres:

• Ambos son considerados altamente evolucionados espiritualmente, moralmente superiores y tecnológicamente avanzados.

• Ambos son considerados seres benevolentes con una profunda preocupación salvífica por una humanidad empeñada en la destrucción del planeta.

• Se dice que tanto los maestros ascendidos de la teosofía como los primeros alienígenas que supuestamente contactaron con la gente durante la «era de los contactados» procedían de Venus.

Partridge encuentra de gran interés que lo único que parece ser marcadamente diferente entre los relatos teosóficos de encuentros con los maestros ascendidos y los posteriores contactos alienígenas de mediados del siglo XX es que, después de 1947, los venusinos/alienígenas/maestros vienen a la Tierra descendiendo en platillos volantes. Antes de 1947, y con respecto al contacto teosófico con los maestros ascendidos, el contacto se producía a través de viajes astrales o durante el sueño.

A continuación, Partridge remite a los lectores al trabajo del contactado más famoso de la época posterior a 1947, George Adamski. Adamski fue de hecho

«. . un ocultista californiano nacido en Polonia que, en 1936, fundó la Orden Real del Tíbet, de orientación teosófica . . . De ahí que no resulte sorprendente encontrar en su influyente libro Los platillos volantes han aterrizado (escrito conjuntamente con el ocultista británico Desmond Leslie), no sólo numerosas referencias a temas y doctrinas teosóficas, sino también una bibliografía que es poco más que una breve lista de escritos teosóficos y ocultistas clave de autores…». Además, los «Hermanos del Espacio» de Adamski no son los extraterrestres de ojos almendrados de los que más hablan los contactados contemporáneos, sino que son más bien «humanoides», parecidos a las descripciones teosóficas populares de los maestros.**

No… no hay nada oculto aquí, Monseñor Balducci.

Partridge, pp. 11-12

**Partridge, 13.